Si vas a llevar a cabo una reforma integral de tu hogar, no tienes disculpa: debes aprovechar para realizar aquellas mejoras que contribuyan a que, además de que tu casa se vuelva más acogedora, funcional y bonita, sea también más eficiente. En definitiva, de lo que queremos hablarte hoy es de la eficiencia energética en una reforma integral, dos conceptos que has de ligar si deseas obtener los mejores resultados.
¿Hay mejor momento que una obra en casa para mejorar aspectos fundamentales como los cerramientos o el aislamiento? Seguro que no. Puestos a iniciar una reforma, lo ideal será aprovecharla a fondo, aunque pueda alargarse unos días o semanas más. De esta manera, disfrutarás de una vivienda que ofrecerá el mayor confort durante muchos años.
Si quieres aprovechar para tirar tabiques o cambiar los azulejos del baño, ¿por qué no potenciar la eficiencia energética en una reforma integral? Además, quizá no sepas que actualmente, todas las casas a la venta y en alquiler han de contar con un certificado energético, influyendo en su precio final. Cuanto más eficiente sea, mayor valor de mercado tendrá. Otra razón más para buscar la mejor calificación posible.
¿Cómo conseguir una mejor eficiencia energética en una reforma integral?
Son varias las maneras que tendremos para conseguir potenciar la eficiencia energética de nuestro hogar. Principalmente, tendremos que enfocar nuestros esfuerzos en tres vías:
1.- Mejorar el aislamiento
¿Cómo podemos mejorar el aislamiento de un hogar? Principalmente apostando por ventanas y puertas más eficientes. Estamos ante los puntos por los que más calor se pierde en invierno y más fresco en verano. Un mal cerramiento implica un mal aislamiento. Lo ideal siempre será apostar por materiales como el PVC.
2.- Renovar la instalación eléctrica
Si vivimos o hemos comprado en una casa antigua, es muy probable que haya que sustituir el cableado eléctrico, ya que estará obsoleto y difícilmente cumplirá con la normativa vigente. Además, el paso de los años hace que una instalación vieja consuma más electricidad. Se trata de algo peligroso y un hecho que nos aleja de la ansiada eficiencia energética. Vigila tus interruptores, cables y el cuadro eléctrico.
3.- Cambiar el sistema de calefacción
El tercero de los puntos que vigilar para conseguir la mejor eficiencia energética en nuestra reforma integral. De hecho, ha de ser una partida fundamental en nuestro presupuesto. Deberemos renovar los antiguos radiadores y, por supuesto, la caldera. Según los expertos, las instalaciones más eficientes pueden conseguir que reduzcamos el consumo de energía en un 30%, lo que repercutirá positivamente en nuestra factura mensual.